LUCIA TORRES

INMANENTE
¿Qué es esto en comparación con esa música profunda y verdadera de los sabios, mediante la cual se investigan las proporciones de las cosas naturales, se revela la concordia armónica y las cualidades del mundo entero, mediante la cual también se unen las cosas conectadas? – Robert Fludd –

La imagen de Lucia Torres tiene un fundamento filosófico que da forma a su obra desde una perspectiva de introspección donde el gesto del dibujo es fundamento para crear un mundo de sutiles esencias poéticas. Éstas confluyen en una concepción estética que da origen desde lo abstracto hasta lo figurativo en unidad. Entendamos que este principio de esencia femenina está instaurada como poética plena a la hora de la creación.

Las reflexiones de la artista moderan los instantes donde el gesto sutil, etéreo, íntimo quedan en manifiesto en cada obra presente. Crear una imagen que sirva como un diálogo psíquico de aquello inconmensurable que puede ser simbolizado, dando continuidad a la experiencia con el tiempo, éste es un factor que ha sabido deslizar con melodías solemnes, como dan manifiestos los videos, donde vemos el instante o entendemos, el crecimiento, la búsqueda de la propia luz, meditar el ritmo de la vida en proyección o tan solo los principios de luz y oscuridad, la eterna dualidad.

La estética íntima es una condición presente en todas sus obras, éstas son instancias plenas. Exteriorizarlas permitió ordenar una instalación proyectada para la Sala del Museo, la experiencia estética que manifiesta permite dar una interacción más armónica al recorrido, generando así una propia idea en el conjunto. Así pensar, el silencio de lo traslúcido, la potencia de la imagen dibujada y el no tiempo en lo audiovisual, entendemos y vemos las últimas producciones plásticas de la artista, manteniendo el carácter gráfico de la repetición. Si, la gráfica, con todas sus variantes ha hecho que la obra de la artista llegue a un punto culmine en el que género un lenguaje con claras señales poéticas / sensibles / etéreas; son creo las definiciones que podría llamar el concepto y carácter de Lucía Torres.

Pero la artista siempre busca un cambio, transformar y crecer. Esta condición de búsqueda es algo inherente de todo buen artista que se precie, contiene el concepto universal y es así que plantea un renacer en su imagen. Ésta toma de postura la lleva a dar al dibujo como eje, estructura, carácter y gesto para lo que da forma hoy; dibujo/gráfica se combinan en búsqueda del ritmo/tiempo, dando como resultado su incursión en lo audiovisual con nuevas composiciones que la llevan a otro plano estético más contemporáneo.

Sumergirse en estas obras y entender que la sensibilidad de la artista dió forma a una serie continua, en la medida en que lo primero existe por sí mismo y los segundos reciben la existencia por participación de aquellos, imitando la naturaleza Intangible, como afirmaba Plotino. Así INMANENTE es una muestra plena de ecos poéticos en los que el dibujo, la gráfica, el video y la instalación comulgan en una idea plena de volver a la raíz de la instancia creativa.

Dardo Fabián Flores
Curador

INMANENTE

Esencia.
Lo más íntimo y profundo del ser.
Energía en su máxima pureza.
Lo primero.
Lo que no puede no ser en todas sus manifestaciones.

Canto I
Momento de sumergirse, en quietud.
Observar, discernir, apartar.
Si es necesario arrancar para renovar.
Para continuar.

Canto II
Decidir, desenraizar, confiar.
Volver a ser.
Elevarse, dejarse llevar, fluir.

Canto III
Volver al Ser.
Una ronda más.
Volver a ser.

Utilizo la repetición, la reiteración, como herramienta rítmica para ralentizar el tiempo, para dar lugar al no tiempo, donde las palabras se diluyen y las emociones ocupan el lugar.
Adentrarse entre los velos sutiles de la instalación, marca también un ritmo entre imágenes, silencios y espacio, que se combinan con el pulso personal y aleatorio del que lo recorre.
El silencio del plano aquieta y potencia la imagen. La emoción conduce a su propio tiempo.
La combinación de la imagen y el sonido en movimiento en forma de videoarte, abre otra ventana y moviliza desde diversos lugares conectando con las fibras íntimas del ser.

Lucía Torres
Buenos Aires, Julio de 2024.